Chorizo en pringue, aceitunas endulzás, calostros y esparragos y esparragueras de ayer 27 de febrero.
A Villarta se va todas las veces que haga falta. Pachahco.
Jero Sánchez.
3 comentarios:
Anónimo
dijo...
A mí también me gusta Villarta, por eso que se ve tan explícitamente en esa foto y por otras muchísimas cosas que son imposibles queden reflejadas en ningún retrato.......esas cosas inexplicables que las tienes bien pegaditas al alma y jamás se van, por muchos años que pasen..... Jesús.
Y el aceite... ¿dónde encuentras ese aceite en Madrid? y la canelilla, por no hablar del sabor de los tomates de la huerta y el sabor de la fruta. El aire, que da gusto respirar.
Lo mejor es que para mi, allí el reloj se para y hay tiempo para todo, sin prisas y tranquilamente.
3 comentarios:
A mí también me gusta Villarta, por eso que se ve tan explícitamente en esa foto y por otras muchísimas cosas que son imposibles queden reflejadas en ningún retrato.......esas cosas inexplicables que las tienes bien pegaditas al alma y jamás se van, por muchos años que pasen.....
Jesús.
¡Qué ricas! ummmm
Un bodegón villarteño.
Y el aceite... ¿dónde encuentras ese aceite en Madrid? y la canelilla, por no hablar del sabor de los tomates de la huerta y el sabor de la fruta. El aire, que da gusto respirar.
Lo mejor es que para mi, allí el reloj se para y hay tiempo para todo, sin prisas y tranquilamente.
Mejillones
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