abejas sin futuro??¿

  Bajo el titular de Estalla la burbuja de la miel (el titular es el cebo, y una vez más, poco tiene que ver con el contenido. Vende el envoltorio) nos hablan de los cambios que se están dando en la apicultura.

  ¿Sólo habla de abejas?  Yo entiendo que a través de ese vehículo narrativo nos podemos enfocar en cosas que nos afectan.

Lo traigo aquí por varios motivos. Por medio ambiente todos sabemos que sin vectores polinizadores no podríamos permitirnos la flora y la vida actual. Tener a Fuenlabrada al lado que ha multiplicado su población y riqueza en base a colmenas , y para muchos era un modelo a copiar; si al vecino le va bien ¿Por qué no a nosotros?

  Con la crisis mucha gente a tirado al autoconsumo, a aferrarse al campo. Que no da dinero, pero da de comer.

   El artículo nos habla de como confluyen varios comportamientos, y como estos –intereses individuales- perjudican enormemente a los apicultores  (aunque se hable de burbuja como exageración).

  Se perjudica al precio, y por tanto al margen. Por la entrada de nuevos parados que  se tiran al monte, y esto hace que ante la nueva demanda (poco profesional, pero ocupa) las tasas para instalar las colmenas suban; por otra parte la entrada de miel china tira por el suelo los precios (problema que se multiplicará por mil si entra en vigor el TTIP); los problemas de enfermedades (cambio climático) y el aumento de los costes por la inversión necesaria.

   Si necesitamos población, y trabajo para ellos, vamos a tirar de recursos naturales. De una eficaz gestión de la marca (por cierto me licencié con la especialidad de marketing ) como la denominación de origen u otras herramientas. Y un tamaño y una inversión que nos permita optimizar costes.  Dificil de realizar, al menos a mi entender.  Pongamos nuestras barbas a remojar.

Caviar villarteño??

La verdad es que me sonó a chufla cuando me lo dijeron la primera vez –hace ya más de una año- pero visto lo visto….  Digo esto porque imagino vuestro escepticismo.  Lo cierto es que ya no nos estraña que rusos o chinos gasten millonadas en clubs de fútbol, edificios en Madrid o empresas en quiebra. Pues bien, hay un proyecto serio para una piscifactoria de esturiones en nuestra capital. Sí, sí. Que a mí tambien me sonó a chufla. Lo cierto es que ya existe esto en España; os dejo el enlaces de la piscifactoria que hay en Granada como prueba:
     http://www.eleconomista.es/materias-primas/noticias/6076588/09/14/Riofrio-Granada-la-mayor-reserva-de-esturiones-ecologicos-del-mundo.html

https://www.caviarderiofrio.com/

Ya está aprobado el proyecto, aunque no ha pasado de los papeles a la fase de obra solo falta la voluntad del capital, para comprar las fincas necesarias, y permisos municipales, que no pondrá trabas pues además de los puestos de trabajo (se esperan entre 4 y 5) se ingresaría por Actividades económicas; impuesto que es importante en los grandes municipios, que concentran industria.

  Como sigue sonando marciano, aporto los planos –me han dicho que no hay problemas- como se ve ya está aprobado por la junta. Igualmente se ve que iría por debajo del chorro. Paralelo a la calleja que lleva al lagar. En el siguiente dibujo intento que quede más claro, pero os dejo es mapa original sin dibujar para que juzgueis vosotros mismos.
 Yo empiezo a creer que estamos un día más cerca de tener nuestro propio caviar. Por cierto ¿A qué día estamos?

Calendario 2017

  Ya disponible el nuevo calendario villarteño 2017.
Este año, además de nuestros Arsenio y Paco, contamos con imágenes de Maricarmen, Jose Luis, Dori y un invitado especial desde Helechosa:  Jose Antonio Bermejo  -muchos habréis visto suyas en las secciones de El tiempo en televisión-; @JuanAntonioBer8 en Twitter.


  Un año más, recordar que No, no lo vendemos. Si alguien lo desea que se descargue el pdf y lo imprima sin problemas. (Es lo que yo hago) Y si puede y quiere tener un detalle con quienes nos muestran estas imágenes seguro que os lo agradecen.
Desde aquí mil gracias a todos y que este año se porte bien con todos nosotros.

ir de cacería es para mayores

  De nuevo, una noticia que nos dice más de forma indirecta de lo que se saca del titular, un mero cebo sin información.

Se nos habla de la caída permanente de licencias de caza. Brutal en los últimos años. Y trata de buscar explicaciones, desde la crisis y que es un deporte caro, a que los jóvenes tienen una oferta de ocio más rica y cómoda.  Yo veo dos explicaciones, y por ellas las traigo aquí.
 La despoblación del mundo rural –algunos pensareis ya que  es obsesión- y el alejamiento del saber tradicional.
No existe el hábito, existe una gran brecha generacional. Ni tiempo en común ni gustos comunes. El gusto por el campo y sus tesoros no se aprende en un rato. Requiere años respetar y conocer; y no sé que requiere más tiempo, la verdad.
 Hasta la generación anterior los padres enseñaban a los hijos, el oficio era un arte, y los resultados necesitaban de trabajo mas tiempo.  Ahora coexistimos pero somos individuos (seres aislados que creen que el capricho nos hace más fuertes). Perdemos saber que nos permitiría vivir como en los últimos 10.000 años lo hizo, a cambio de tele y comodidad.
 No llamo a sacarse la licencia de caza, pues yo mismo no cazo. Pero sí que demos más valor a quien hace que a quien luce. Nunca me atrajo cazar ni pescar –aunque no me vendría mal saber- pero si aprecio esta tarea como parte de un medio ambiente sano. Los cazadores que he conocido compartían muchos de mis valores ecologistas. Disfrutan viendo un bicho, un pájaro o un paisaje. Sin un medio ambiente sano ellos no podrían cazar. 

Por cierto aprovecho para dejar un video de Jara y sedal sobre la cría de la Perdíz. Raro era el día que no iba a la huerta y cruzaban un par de vecinas patirojas el carril. Pero cada vez hay menos huertas -obviamente ya no se siembra- y menos comida para los animales. Me gusta pensar que Villarta es una isla de biodiversidad y riqueza, pero cada vez me cuesta más ver: perdices, águilas, el tiro... 

 

hospital de la Siberia

Tenemos al Hospital de Talarrubias como un ambulatorio grande. Una parada burocrática para que te manden a Badajoz.

No tengo criterio ni opinión directa; ni sé de sanidad ni he necesitado ir.

Sin embargo, me alejo de esa tradición tan nuestra de tirar por tierra lo nuestro, y esta semana traigo un indicador de éxito.

La noticia nos habla de que se ha realizado 1.000 operaciones de vesícula en el Hospital de la Siberia. El número solo es eso, un número para la gestión, pero nos indica varias cosas:

-Que se realizan muchas operaciones, y los quirófanos están operativos.

- Que nuestros sanitarios tienen un nivel extraordinario. Si un hospitalillo es capaz de innovar y desarrollar una técnica nueva a nivel mundial se debe a la inversión en formación de nuestras universidades. En cualquier sitio hay expertos, aunque no los apreciemos.

- Que nos falta inversión e infraestructuras, que aún estamos muy por debajo de otras regiones. Que el hospital puede crecer, y que se consiguió luchando por ello. A unirnos y no nos dejemos caer.

almendros como ayuda

Sé que me alejo del folklore y la nostalgia que os gusta visitar y os une a Villarta, pero creo que de vez en cuando debo mostrar pequeñas tendencias a tener en cuenta. 
El almendro no es la solución -porque no hay una única, fácil y cómoda- pero si es un retal que ayuda si aporta parte de la renta necesaria para soportar población. Ya lo hemos escrito varias veces, y repito, sumar un par de meses de aceitunas, con el almendro en este caso o rentas de temporada y sostenibles pueden ayudar.
La suma de pequeños rentas, que de como resultado que el pueblo tenga vida. Que no desaparezca.
 
Tenemos terreno y agua. Tierras muchas veces perdidas por desatend.idas  ¿Qué nos cuesta plantar unos almendros y que crezcan cuando y como quieran? No piden pan, y tenerlos nunca nos viene mal.
 El artículo nos habla de que aumenta su consumo por diversos motivos  (fundamentos económicos de fondo). Desde el crecimiento del consumo en paises con unos mercados gigantes; el papel de la comida saludable; dos multinacionales como indicadores de inversión… etc.
En fin, una opción más dicha una vez más. A ver si agarra.

centro de día, a 12 dic

El puente pasó entre nieblas, y yo entre olivos (y niebla, claro.)

Así que no me cundió a ver como iban las obras del centro de día. Y cuando conseguí dejar atrás a la lumbre y el libro sólo llegué a ver el exterior.  Se observa la puerta exterior por donde antes había muro; y varias salidas y tomas industriales, supongo que de las máquinas de la cocina.  Por el patio se ve la gran máquina de aire acondicionado.

  Por lo que me han dicho ya está casi acabado, y tal vez en breve veamos la inauguración.

documentos para coger aceitunas

  Este año las aceitunas traen novedades –como habrá visto todo el que haya estado de olivares este puente- y vienen en forma de papeles.

Se trata de documentar cada recogida. Que a cada explotación solo pueda corresponder una entrega; y cada saco se sepa –en teoría- de que explotación agrícola procede.  Trazabilidad lo llaman.

Para dificultar los robos la junta sacó un decreto, del que nadie se enteró. Se pone el foco en el transporte y la almazara (si no llevas la documentación te pueden crujir o no recogerte los sacos según el decreto de la junta).

Enlace al   DOE de la junta

En los anexos del DOE está la hoja a imprimir y rellenar. Si se va a solicitar ayuda de la PAC  (subvención) además se debe llevar la última solicitud. Os dejo esta noticia de El periódico de Extremadura que lo explicará mejor que yo.

Lo que más dificultad plantea es saber el número de explotación de la parcela, de todas formas, preguntar en donde las pensáis llevar y ellos saben. Se me ha olvidado el papel con el nombre de la web allí.

pleno octubre 2016

           inicio de licitación para equipamiento para centro de día

  toma de posesión de nuevos concejales

protección civil

                         programa de empleo y experiencia

 pinchando sobre las imágenes se amplia y se puede leer perfectamente, pero un vez más os aconsejo descargar las fotos y verlas en vuestro ordenador que os permitirá leer mejor.

 Siendo sólo 2 hojas, creo que es más facil acceder así que a través de un pdf y el enlace. Ya me diréis para futuras entradas.
*de todas formas lo añadiremos a la carpeta en pdf. A modo de registro público.

futuro recinto ferial

Han comenzado las obras para crear las infraestructuras básicas (el alcantarillado, red eléctrica, etc) en el futuro recinto ferial.

  De momento se ha retirado la tierra -y los eucaliptos que estaban volviendo a salir- y se allana el terreno. De momento de la zona lindante con la carretera; y se cava la zona que debe albergar las tuberias y desagües.

 

Supongo que, como mínimo se dejará al ras todo el terreno, auque no haya fondos para más. Con lo que al menos en semana santa y verano ganarémos una zona de aparcamiento despejada.

Gracias a quien nos envió las fotos (que se me olvidó preguntarle como firmar el artículo, o si prefería el anonimato. Y opto por la prudecia. Pero gracias)

Brujeriiia !!

1818. Dos siglos parecen muchos años, pero estamos hablando del abuelo de mi abuelo, lo justo para no haber conocido a nadie de esa generación.  Pero vínculo directo, nada lejano.
Arturo nos descubrió este caso de brujería en Villarta y –aunque he tardado mucho en leerlo- aquí está al fin. Pinchando sobre todas las imágenes las veréis al máximo tamaño; aunque os recomiendo guardarlas en el ordenador y leerlas despacio, trazado difícil de leer, necesita su tiempo.
  Volviendo a nuestra historia. Villarta, 1818, se acusa –por la persona de el cura- a Vicenta García de Brujería.

enlace a todo el documento digitalizado.

 
En concreto, se la acusa de curaciones supersticiosas.  La mujer de Juan Marfil –creo que es el abuelo de mi abuelo- ya no sabe que hacer para que su marido mejore, pues lleva meses enfermo. Así pues decide acudir a una curandera. Ni más ni menos que una curandera; y ésta le receta una serie de sortilegios. Entre ellos enterrar  huevos de gallina que actuaran de pararayos para el mal.



Nada contra la religión ni magia negra. Una simple superstición, un ritual o un amuleto te podían condenar ante la inquisición. No he detectado nada más; la mayor parte del legajo son declaraciones duplicadas dichas por distintas personas (de gente que no sabía escribir ni leer lo que firmaba, que esa es otra). La prueba es el testimonio, la palabra.
Pero estamos en 1818, y lo que más me llama la atención de todo lo leído es el abismo que nos separa respecto a costumbres y recursos.  Dos siglos y parece otro mundo.
  Por fortuna para Vicenta, la cosa quedó en poco, el cura encargado de velar por la moral la vigila y si ella se arrepiente y promete no volver a tales prácticas no habrá castigo.
Como digo, la mayor parte es recopilación de testigos y burocracia interna. Es un expediente completo y recoge todos los pasos desde el cura de pueblo a su superior, de ahí al arzobispado y la vuelta. Si queréis leer con las primeras paginas tenéis de sobra.












  Obviamente he buscado más documentos, más casos en el entorno y otro tipo de expedientes por diferentes casos.
En 1583 Juan Muñoz es detenido en los Yébenes, e incluso encarcelado, sin quedar claro el motivo.  Salió del atolladero porque un vecino se puso de fiador y avaló por su honra.
 De nuevo la palabra de uno como aval suficiente; aunque es fácil pensar que también hubo dinero para lubricar la moral del aguacil. (sino fue el propio rescate el motivo del arresto).


La historia de Vicenta es un candil para enseñarnos parte de esa sociedad -y por contraste la nuestra- desde la importancia de la palabra como contrato (la reputación como garantía); la carencia de médico al que recurrir –o no tener dinero para ello-; la necesidad de trabajar aunque lleves meses gravemente enfermo, porque si no vas, no comes; las bestias dentro de casa y aún así los huevos son casi un lujo; la palabra de la autoridad es suficiente, ni jueces ni juicio ni pruebas materiales (con la arbitrariedad y la corrupción de fondo)  ; la inmensidad de las distancias y las comunicaciones, que convertían a cada pueblo es un mundo cerrado.
Como digo, otro mundo totalmente diferente. En el mismo pueblo y con el mismo apellido, pero nada que ver con Juan Marfil me temo.

           Agradecimientos a Artura Molina.