Que Villarta pierde vida lo vemos cada vez que vamos. Que los pueblos cada vez están más despoblados es evidente. Es tendencia mundial, todo se concentra y la población también; se tiende a la ciudad como búsqueda de trabajo (a las supraciudades en muchas partes del mundo), y el trabajo –se tiene por- medio de vida.
Así, el diario nos trae la descripción estadística. Como os podéis imaginar, las ciudades más grandes en origen han crecido más aún. Y los pueblos pequeños y alejados pierden mucha más poblción. Las ciudades atraen y roban jóvenes a los pueblos; y luego se dirá que los pueblos son caros porque los viejos necesitan mucho gasto (no se contabiliza los jóvenes robados en la ecuación)
En nuestro caso sería la mitad de la foto, la mitad de los datos, pues buena parte de nuestros jóvenes si van a Villanueva, Cáceres o Mérida; pero a nadie se le escapa que otros muchos van a vivir a Ciudad Real; y cad vez más. El mismo modelo de focos de población, pero con otro nombre. Y al ser de otra comunidad el diario no pone los datos. Da igual, nos preocupa la enfermedad y los cuidados, no tanto los síntomas.
Lo que subyace detrás es el modelo económico, que prima el tamaño en forma de sinergias y el tamaño de las inversiones. Demasiado para hablar extensamente en este blog. Pero importante para la supervivencia de los pequeños pueblos como el nuestro.
Deberíamos abrir un diálogo para todo el que quiera participar sobre el tema, pero no sé como hacerlo de forma útil. Que sirva para tomar conciencia, pero tambien decisiones futuras.
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