Dado que está siendo un año monográfico-virus. Aprovecho para recordar que no es la primera pandemia que sufre Villarta. Ya hemos dicho muchas veces que El tizne se celebra en recuerdo a una de ellas; cuando se pretendía santificar/purificar las casas a través del humo de plantas medicinales, y se consiguió purificar sí, pero porque se renovaba el aire de casas no demasiado ventiladas (donde además se convivía con bestias, gallinas y suelo de tierra). Así el aire frío purificó, matando a patógenos que hubiera en el interior. No como se pretendía -sino por higiene básica- pero se acabó con la pandemia.
Hoy, gracias a Arriscao y Miguel, os traigo un documento sobre la pandemia de 1904, pinchar sobre la imágen para ir al documento.
Texto -y testimonio- creado por el médico del pueblo en aquella época, Blas Torrero, y que se encuentra en la biblioteca virtual del ministerio.
La letra manuscrita complica la tarea de leerlo, pero puede ser muy interesante. Sobretodo ver con los ojos de esa época.
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