Parte de mis vacaciones son leer, con calma. Los días que consigo encontrar tiempo y silencio (mucho más difícil lo segundo).
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Este año me he traido a mis queridos Vila y Chamorro. Y lo voy a acompañar de otro libro, este es un libro que se desarrolla en nuestra Siberia.
Su autor es un periodista que ya ha publicado varios libros, sobre todo de viajes en confines de otros mares. Esta vez viene a Agudo (sus abuelos son de Tamurejo y Garbayuela) a descubrirse. A ver la vida en directo, a descubrir privaciones y gozes de a pie. Tiene buena pinta. Yo ya lo he encargado, en la libreria de barrio, claro. y en 4 días lo tengo aquí -os pido que hagáis lo mismo. Si daís vuestro dinero a multinacionales que no pagan impuestos aquí, luego no lloriqueeis con que la culpa es de los políticos.- ya voy afilando las gafas, que luego todo son prisas.
*texto escrito antes de agosto, luego con la entrada del virus en Villarta quedó relegado. Por eso entontraréis discrepancias en los tiempos de los verbos.
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